Pues hoy va a ir por ti. Porque te lo mereces desde hace muchos años y porque eres una de las personitas más importantes de mi vida. Aunque te tenga a un paso y no te vea, pero se que estás ahí, que me quieres, que te quiero y que si nos necesitásemos sólo tendríamos que decirnos "VEN".
Quiero recordar como empezó todo porque aunque podría escribir un libro lleno de situaciones raras que he vivido, conocerte fue una de esas historias que cada vez que recuerdo no puedo evitar sonreír.
Hace algo más de seis años, decidí que ya tocaba sacarme el carnet e conducir y como había estado apuntado (aunque sin ir) en todas las autoescuelas de Ibi y me daba palo volver, decidí pillar una oferta en Alicante y durante mes y medio bajaba en autobús cada tarde a la capital. El recorrido siempre era el mismo y había un chico que en el pueblo de al lado coincidía a veces en el trayecto con una amiga suya.
Una noche, estaba en la estación de Alicante esperando a subir camino de Ibi y allí te vi por primera vez. Te miré, miraste... ¿o miraste y después miré? El caso es que te subiste en el mismo autobús que yo y aunque era de noche, las miradas se sucedieron durante todo el viaje. Poco antes de llegar a mi destino tú te bajaste, te observé mientras te alejabas y casi al final, cuando estabas lejos, tú también te volviste a mirar.
No sabía nada de ti pero resultó que la chica con la que ibas era la misma que otras veces viajaba con ese otro chico en el bus y deduje que seriáis amigos. Bastantes semanas después, por casualidades de la vida, me encontré en internet con el amigo de tu amiga y en ese momento me dije: ahora voy a poder conocer al chico del autobús. Me porté mal, lo sé. Entablé un colegueo con aquella persona con un único fin, saber quien eras tú, tu nombre, tu edad, todo.... El día que le hablé a él de ti se cabreó, se sintió utilizado pero al final valió la pena.... a pesar de que tenías miedo porque pensabas que estaba loco o algo así, quedamos una tarde que tenias clases en la EOI para conocernos.
A partir de ahí.... los dos conocemos la historia. Tú cagado en mi coche porque aún no sabía yo conducir mucho, el cine en Alcoy, mi piso, los besos.... conocer a tu gente, que conocieses a mis amigos, mi Koda, HNMPL, verte en fiestas de moros, ...... quererte mucho. Son tantos y tantos recuerdos!
Desde que te conocí no he visto nunca en ti una mala cara, ni siquiera un mal gesto, al contrario... siempre sonríes. Estés mejor o estés peor sigues teniendo esa carita que mezcla la sensatez con la travesura.... Eres grande. No se si te lo he dicho muchas, pocas o ninguna vez, pero cuando una persona consigue despertar sonrisas en otra no se puede calificar de otro modo....
La primera vez que me dijiste CORET se me quedó ahí... para siempre... y por tiempo que pase y sea cual sea la situación emocional que podamos estar viviendo cada uno de nosotros, siempre serás mi "coret", esa personita que JAMÁS querré tener lejos de mi mundo. Porque no sólo formas parte de él sino que en buena parte, me ayudaste a construirlo.
Y puede que algún día, el camino de lo que podamos sentir vuelvan a cruzarse, pero pase o no llegue a pasar eso, eres y serás una de las piezas fundamentales de mi puzzle.
Te quiero mucho feo!!!!
1 comentario:
Jolines Juanjo! Me encanta lo que cuentas y como lo escribes...Eres toda una caja de sorpresas y muy valiente para atreverte a desnudar tu alma frente a todos nosotros. Quiero más, así que ya sabes...a escribir!!
Un besazo.
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